PRIMER MICRORELATO

Autores: Samuel Pardo Fernández, Javier García Álvarez y Tomás Rodriguez Hisado.
EL SECUESTRO DEL MURCIÉLAGO:
 Erase una vez un murciélago que vivía en una cueva con su familia y por las noches no entendía por qué debía dormir boca abajo. Un día estaba comiendo gusanos y lo cazaron las serpientes. La familia preocupada fue a buscarlo, con mucha angustia, se dieron  cuenta  de que lo habían cazado y volando, volando por el bosque y la ciudad vieron que había una madriguera, escucharon un tremendo chillido que podia ser de su pariente desaparecido.
Pensaron que no podían entrar y de repente salió de la madriguera la malvada serpiente, se dirigió a ellos y les dijo:
"Si quereis volver a ver a vuestro pariente vivo debeis traer una caja completa de 300 ratas sin marcar que me sirvan de comida...
Los murciélagos desesperados se dividieron en grupos y fueron rápidamente a por las ratas a las cloacas y a las casas abandonadas, y sólo consiguieron 100 ratas sin marcar,con lo cual le faltaban 200. Fueron al banco de ratas y pidieron un crédito de ratas con  lo cual tuvieron que hipotecar su cueva. Al llegar a casa del banco recibieron un mensaje de la serpiente que decía: "SE OS ACABA EL TIEMPO,JAJAJAJAJA".
Mientras, en la madriguera de la serpiente, el murciélago secuestrado ideó un plan mientras practicaba capoeira y flipaba como un mochuelo. El murciélago se puso cachas de tanto vicio de capoeira . Mientras practicaba capoeira hacía un agujero y para que la serpiente no se diera cuenta le pidió una cortina de ducha con la escusa de que le daba vergüenza.Y practicó tanto,tanto,tanto,tanto,tanto,tanto,tanto y tanto y tanto que cada vez que se miraba el bíceps se daba en el ojo. Cavaba,cavaba y cavaba que hizo un túnel de 1 km pero hacia abajo y dio a parar a una estación de metro. 
Mientras en la cueva la serpiente se sorprendía de la tranquilidad que había, no escuchaba ningún ruido, fue sigilosamente y corrió la cortina de ducha. Cual fue su sorpresa cuando vio que el murciélago no estaba y en su lugar había el agujero más grande que jamás había visto.
El murciélago esperó pacientemente la llegada del convoy, se metió en un vagón y como estaba tan, tan, tan, tan, tan, tan y tan cansado que se quedó dormido en la barra. Su sueño era tan profundo que se paso seis paradas. Unos malvados chicos que iban en el mismo vagón se fijaron en él y lo cogieron...
CONTINUARÁ...